Consejos para afrontar con éxito la jubilación

¿Qué hacemos si nos llega la edad de jubilarnos y aun estamos físicamente aptos para trabajar, generar ingresos, producir? Esta situación, por la que atraviesan muchos profesionales tras alcanzar los 65 años de edad, puede ser fuente de preocupación y malestar si no se maneja adecuadamente. En especial si, a pesar de haber trabajado toda una vida, esto no se ve reflejado en la pensión que recibe el jubilado, ya sea esta del estado o del sistema privado de fondos de pensiones (las famosas y criticadas AFP). En Derrama Magisterial trabajamos a diario por cumplir nuestro papel de seguro complementario a estas opciones, a través de la figura del ahorro voluntario e intangible que se rentabiliza a través de la vida profesional. Pero no todas las profesiones tienen una Derrama que los apoye en esos momentos. Veamos estos consejos extraídos de la web autoayudame.blogspot:

El momento en el que un profesional de cualquier actividad, oficio o disciplina académica, debe jubilarse es uno de los más difíciles de enfrentar desde el punto de vista emocional y psicológico, en especial cuando la persona llega a la edad legal de jubilarse con pleno uso de sus facultades físicas y mentales y siente que aun está en capacidad de ser productivo. La jubilación es aquella etapa en la que uno finalmente descansa y comienza a recibir las retribuciones que el Estado, la sociedad y la familia le tienen preparadas luego de haber pasado su vida brindando un servicio, sea este público o privado.

Pero en sociedades como las nuestras esta figura no se cumple y, más allá de su conceptualización ideal (tiempo para descansar y disfrutar de la familia gracias a este nuevo tiempo libre) la jubilación se convierte en fuente potencial de problemas por variables que van desde la necesidad de seguir percibiendo un ingreso mensual hasta la sensación de que aun se está en posibilidad de trabajar y que no es “demasiado viejo” para dejar de hacerlo. Y en el medio otras opciones de carácter emocional como el dejar de sentirse útil, la falta de costumbre de estar en casa (que afecta al jubilado y también a los miembros de su familia, que no están habituados a estar junto a él/ella todo el tiempo), entre otras.

Ocho consejos para afrontar con éxito la jubilación

• Prepárese con antelación para el momento de la jubilación: Al ir introduciendo progresivamente nuevos hábitos y costumbres mientras aun esté laboralmente activo, se irá acostumbrando gradualmente a lo que será su vida después de la jubilación.
• Realice una lista de actividades deseadas: Seguro que existen varias de ellas que siempre ha querido realizar para las cuales nunca ha encontrado el tiempo necesario. Entre las actividades más deseadas por las personas jubiladas se encuentran viajar, apuntarse a clases de música o pintura, realizar algún voluntariado social, etc.
• Evite que los temas relacionados con la salud se conviertan en una obsesión: Resulta más agradable cuidarse, realizar ejercicio físico acorde a sus capacidades y mantener un estilo de vida saludable, controlando la alimentación y una correcta hidratación.
• Realice actividades fuera de casa: Pasear y visitar exposiciones, ir a menudo al cine o al teatro, etc., pues les mantendrá en contacto con el mundo que nos rodea y les enriquecerá continuamente.
• Mantenga la calma: Enfocar los problemas sin prisas, tomar las cosas como vienen y afrontarlas de forma serena.
• Evite la soledad: Fomente el contacto con los demás, converse con familiares y amigos, y planeando actividades juntos.
• No tenga miedo a envejecer: Es un proceso natural y un privilegio. Es positivo aprender a envejecer con salud y alegría.
• Manténgase optimista: El buen humor y estar abierto a nuevas actividades y experiencias le aportará mayor calidad de vida.